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Falseamiento de partes de trabajo. No procede el despido si la falta de buena fe es recíproca.

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El trabajador de una empresa de limpieza presta servicios en diferentes comunidades de propietarios elaborando partes de trabajo semanales que reflejan el horario realizado cada día. Ante las quejas de los clientes y debido a las sospechas de que el trabajador incumple su horario, la empresa contrata un detective cuyo informe refleja que, durante los días observados, el trabajador falseó los partes de trabajo ya que estos reflejaban un horario de 8:00 a 16:00 y sin embargo abandonó el trabajo entre 35 minutos y 1 h y 45 minutos antes. La empresa considera que estos hechos constituyen un incumplimiento contractual muy grave consistente en la transgresión de la buena fe contractual, por lo que comunica al trabajador su despido disciplinario.

El trabajador presenta demanda de despido y, ante la desestimación del juzgado de primera instancia, recurre en suplicación. Considera que por parte del empresario existe una falta recíproca de la buena fe pues impone al trabajador una jornada de 40 horas semanales mientras el convenio colectivo de aplicación establece una jornada laboral de 38,5 horas de trabajo efectivo semanales. Esta circunstancia, junto con la falta de perjuicio alguno para la empresa (pues no dejaba trabajo sin hacer), debería conducir a una graduación de la sanción no pudiendo ser la más severa de despido.

El TSJ Asturias acepta la aplicación de la teoría gradualista de la sanción invocada por el trabajador por lo que estima el recurso de suplicación declarando la improcedencia del despido.

TSJ Asturias 24-5-16, EDJ 105004

Fuente: ADN Social

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