Indra, en cuya tecnología han confiado más de un centenar de ciudades y que participa en exitosos macro proyectos de transporte, como el AVE a la Meca o la ampliación del Canal de Panamá, veía recientemente cómo el proyecto de implantación de la tarjeta de transporte sin contacto del Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM), en el que ha sido socio tecnológico clave, recibía un galardón a la Mejor actuación de servicio pú- blico, otorgado por el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid.
Más allá de este premio, el proyecto es reconocido internacionalmente por su concepción y avanzada tecnología y es objeto de estudio y análisis por administraciones y empresas de todo el mundo. Y es que, como señala el director en el mercado de Transportes de Indra, José Antonio Francés, “se trata de un proyecto de referencia en medios de pago a nivel mundial”.
“La colaboración con el CRTM se inició en los albores del proyecto”, apunta el directivo, “cuando Indra ya participó en la definición y diseño de la tarjeta y realizó proyectos piloto que establecieron las bases tecnológicas para la implantación definitiva”. Dicha implantación ha tenido lugar en diferentes fases, en las que se ha ido extendiendo el uso de la nueva tarjeta a los diferentes medios de transporte de la Comunidad hasta llegar al momento actual, en el que la tecnología de ticketing sin contacto de Indra está instalada en Metro de Madrid, Renfe Cercanías, los más de 2.000 autobuses de la EMT de Madrid, los autobuses interurbanos, tranvía y metro ligero; además de los estancos y cajeros que cuentan con el equipamiento para la venta, personalización y recarga de tarjetas. Hasta la fecha se han emitido tres millones de nuevas tarjetas y está previsto que la tecnología sin contacto se extienda a los títulos multiviaje y sencillos este año.
Según explica el Consorcio de Transportes, el proyecto se ha desarrollado en tiempo récord, pues su complejidad implica la coordinación con los 40 operadores de transporte públicos y privados, así como con los 179 ayuntamientos de la región. En palabras de Francés, “para que el ciudadano pueda abonar de forma ágil y con un único título los diferentes medios de transporte, existe una avanzada y compleja tecnología, no sólo en las tarjetas y validadores de control de accesos sino en los sistemas de recaudo, back-office y compensación que facilitan la gestión económica del servicio de transportes y determinan el importe que se debe pagar a cada operador”.
No cabe duda de que estos sistemas de ticketing tienen un claro impacto en la calidad de vida de los usuarios, al hacer más cómodo y sencillo el acceso, reducir notablemente el tiempo empleado en el pago y fomentar la intermodalidad, el uso combinado de los diferentes medios de transporte. Estos beneficios pueden reflejarse también en un mayor uso del transporte público, consiguiendo mejoras en la movilidad, la reducción de los atascos y de las emisiones contaminantes.
En el caso de la tarjeta de transporte madrileña, los aspectos más valorados por los ciudadanos, según el Consorcio de Transportes, son la posibilidad de escoger el período de uso de 30 días, la amplia red de oficinas de gestión y la recuperación del saldo en caso de extravío del título de transporte.
El crecimiento del ‘ticketing’
“En ticketing estamos entre las cuatro o cinco principales empresas a nivel mundial. Contamos con producto propio, que diseñamos, desarrollamos y producimos en España e implantamos en los cinco continentes”, destaca Francés. “Por nuestros sistemas de recaudo, tanto de ticketing como de peaje, pasan transacciones por valor de más de 50.000 millones de dólares al año”, añade.
El negocio de los sistemas de ticketing o recaudo automáticos, generado por los servicios de consultoría, desarrollo, implantación y mantenimiento de sistemas en todo el mundo, duplicará su facturación en 2021. Pasará de los 6.420 millones de dólares previstos en 2016 a los 11.950 millones de dólares, según un informe sectorial publicado por la consultora Research and Markets, que destaca a Indra entre las empresas líderes del mercado a escala mundial.
La tecnología de Indra
ya está implantada en metros como los de Barcelona, Valencia, Lisboa, Santiago de Chile, El Cairo, Mumbai, Calcuta o Shangai. También cuentan con sus soluciones el ferrocarril suburbano de Ciudad de México, el metro ligero de Austin y el tren ligero de San Luis, en Estados Unidos, o el monorraíl y el metro ligero de Kuala Lumpur, en Malasia. En el caso de los autobuses, más de 14.500 vehículos de países como Brasil, Colombia, México, Argentina, Polonia, Bulgaria, Marruecos, Portugal o España cuentan con la solución de ayuda a la explotación de Indra.
La compañía, además, sigue liderando proyectos europeos de I+D+i que persiguen el pago integrado de todos los medios de transporte a través del móvil y otros sistemas avanzados.
Fuente: elEconomista
